Aunque las pequeñas empresas, las familiares, las microempresas ente otros negocios que apenas comienzan a producir o prestar servicios en baja escala, han cometidos muchos errores en su desarrollo, es ahora en este tiempo de la tecnología y la información, de corregirlos y en el mejor de los casos empezar a preverlos.
Uno de estos errores es creer que por ser pequeños o estar en etapa de despegue, no es importante el uso de la tecnología y las comunicaciones, siendo esta forma de pensar la que les ha impedido crecer, producir con mayor facilidad, mercadear adecuadamente, advertir nuevos competidores o desarrollarse con mayor innovación.
Es así como las nuevas tecnologías informáticas y las nuevas tendencias de comunicación dan dinamismo a los negocios, aspecto primordial en la búsqueda de los ávidos consumidores, quienes tienen una gama bastante amplia por lo que cada vez son más demandantes en su búsqueda para satisfacer las necesidades.
Las TIC agrupan los sistemas para administrar la información, y especialmente los ordenadores y programas necesarios para convertirla, almacenarla, administrarla, transmitirla y encontrarla. Constituyen nuevos soportes y canales para dar forma, recibir y enviar, registrar, almacenar y difundir contenidos de todo tipo.
Obedecen entonces a las herramientas actualmente disponible para entronizar la propuesta de valor corporativa en el nuevo entorno globalizado, y que a la vez permitirán intercambiar conocimiento para lograr una ajustada contextualización del negocio inmerso en los mercados altamente tecnificados y aunque las pequeñas empresas que inician estén basadas en ideas sencillas, si utilizan las TICs apropiadamente, podrán desenvolverse al mismo nivel de los negocios grandes en el mercado.
Las viejas ideas de clasificación de los negocios en grandes y pequeños de acuerdo a su estructura física y económica, en este medio ya no aplican pues se observan exitosas empresas con cuantiosas cifras en su facturación operando solo desde un sitio en la internet.
En este nuevo contexto donde la Web está redefiniendo la forma de comercializar, de anunciar y en general de relaciones en distintos ámbitos de la sociedad, la velocidad de la información y la proyección de ideas de negocios innovadores es predominante, debe ser entonces un compromiso de las nacientes o pequeñas empresas perder el miedo a la tecnología y avizorar que ahora existen herramientas altamente difundidas y democratizadas que a muy bajo costo podrán ayudar a impulsar el negocio en formas insospechadas.
Se tienen herramientas de comunicación masiva que trabajan las 24 horas del día, una vez implementadas no necesitan mucha atención, entre ellas se encuentran los motores de búsqueda, las redes sociales, portales de videos y sitios web de nichos específicos, con los cuales se hacen alianzas para promocionar productos y servicios sin realizar erogaciones de dinero, estas opciones ya sean gratuitas o pagas están dispuestas para obtener mayor éxito en identificación de demanda de productos o servicios y ofertar soluciones a esa demanda lo cual genera ventas efectivas.
La utilización de las TICs es dar un giro en la proyección del negocio para incursionar en nuevos segmentos del mercado y ubicarse donde todo el mundo está buscando la información que necesita, la internet.
Toda esta avalancha tecnológica que hoy nos envuelve a llevado a nuevas clasificaciones en la educación, en lo que se refiere a analfabetas y escolares; jóvenes y viejos; actualizados y obsoletos, entre quienes se abre cada vez una brecha más amplia.
TereVallejo
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